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Cáceres | 02·06·22 | 06:30 | Actualizado a las 11:06
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Uno de los camareros con el robot. CarlaGraw
El restaurante Big House (ubicado en el centro comercial El Farallón del R-66) ha incorporado el primer robot camarero con cara de gato de la capital cacereña para trasladar los pedidos de la cocina al comedor y aligerar así el trabajo al resto de compañeros. Este androide se mueve con soltura, celebra que le rasquen las orejas y puede cargar numerosos platos en cada uno de los paseos que se da por el establecimiento y la terraza.
Su nombre, a falta de que le rebauticen, es Bellabot y está de prácticas en el negocio que regenta Qiao Ping Liu. Del mismo modo en este bonito espacio ofrecen varios tipos de masajes terapéuticos como complemento a la comida. La propietaria gestiona otro local con el mismo nombre en el Nuevo Cáceres. Llevan 22 años en la ciudad ofreciendo a los comensales una cocina con mimo y de gran calidad, presente también en el servicio a los clientes.
«El funcionamiento del robot es muy simple. Bella posee una autonomía de batería de 24 horas. Cuenta con sensores para no tropezar con ningún cliente. Se mueve con determinación entre las mesas y, si se cruza un niño, se para al instante. Sonríe y habla. Con exquisita educación, pide a los comensales que le dejen pasar», explica Liu a El Periódico Extremadura.
En la parte superior, lo que vendría a ser la cabeza, una pantalla recuerda las caras de los personajes de animación con dos grandes ojos redondos que muestran expresiones faciales. De ahí a que se asemeja a un simpático felino y emula algún que otro maullido. «Nos echará una mano y podremos tener más tiempo para atender y charlar con nuestros clientes. Los robots mejoran la salud laboral de la plantilla», destaca con amabilidad la dueña del negocio.
Este androide inteligente aunque no se parezca en nada a Arnold Schwarzenegger (Terminator) despierta bastante interés entre el público asistente que va al restaurante Big House. Una auténtica atracción y espectáculo. «Todavía es pronto para que se hagan habituales, pero le hace mucha gracia a la gente y es algo que viene para quedarse y ayudar sin eliminar puestos de trabajo», manifiesta Liu con una sonrisa.
Mientras tanto, Bellabot entra y sale llevando a bordo exquisitas propuestas asiáticas, manjares como langostino frito con semilla de sésamo, pato asado, solomillo de ternera, cazuela de berenjenas, rollitos vietnamitas, ensaladas, sushi, sashimi... Aunque cuenta con una amplia carta, la mejor opción es entrar en el juego que proponen y dejarse llevar por este lugar que asimismo sirve a domicilio y que por tener, tiene hasta un camarero robot.
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