Era cuestión de tiempo que nuestra sección de cómics tuviese un apartado especial dedicado al universo Star Wars y nos estrenamos en este aspecto con un monumental cómic, editado en formato Omnibus por la editorial Planeta Cómics, que nos trae una de las grandes historias, desconocida para muchos fans, del mejor villano de la historia del cine. Hablamos del temible Darth Vader.

Aprovechando el ‘boom’ de la serie de Disney ‘Obi Wan’, Libertad Digital analiza esta historia de Vader que transcurre justo después de su transformación en el lord oscuro de la fuerza y su paso de humano a máquina. Sí, hablamos de ese momento comprendido entre el final del Episodio III, la Venganza de los Sith, y el IV, una Nueva Esperanza.

Antes de entrar de lleno en materia, analizamos el apartado técnico de este cómic: 624 páginas, tapa dura, con guion de Charles Soule y dibujo de Giuseppe Camuncoli en una edición integral de la editorial Planeta Cómics. Precio: 50 euros.

Lo hemos comentado antes de empezar con el análisis. Nos encontramos ante los primeros días de vida del Darth Vader que conocimos por primera vez el 7 de noviembre de 1977 de la mano de George Lucas y su Star Wars Episodio IV Una Nueva Esperanza. Vader, mitad hombre, mitad máquina, acaba de nacer de las cenizas del Anakin Skywalker que casi muere a manos de Obi Wan en La Venganza de los Sith. De hecho, el inicio de este cómic sí que se vio en los cines y coincide con el momento en el que el lord oscuro descubre que Padme ha muerto justo después de levantarse de la mesa de operaciones. Ese es el punto de inicio de esta historia con guion de Charles Soule y dibujo de Giuseppe Camuncoli.

En este monumental cómic vamos a conocer de primera mano cómo Vader pasó de ser un desconocido que se colocaba al lado del Emperador ante las miradas curiosas de la gente, a ese villano que hacía temblar a sus aliados y enemigos cuando le decepcionaban o le enfadaban. Tendremos varias historias que darán personalidad y profundidad al personaje a través de, por ejemplo, su camino hacia construir su primera espada láser sith, la cacería de los Jedis que sobrevivieron a la famosa matanza de la orden 66 y como no a la decisión de establecer su cuartel general en el planeta Mustafar, lugar que casi le ve morir cuando todavía era Anakin Skywalker y que, dicho sea de paso, será vital en el devenir de esta narración.

Este Darth Vader orígenes, por así decirlo, nos muestra algo que todos los fans de Star Wars están deseando ver en cines o televisión y que por el momento nadie se atreve a explorar, es decir, la historia de cómo Vader desplegó todo su potencial para gobernar la galaxia cazando jedis e imponiendo el miedo y la ira que controlan su mente y su corazón. Esa historia no se ve en la serie Obi Wan ya que ahí ya se aprecia a un Vader experimentado y asentado como mano derecha del Emperador, sin embargo, en este cómic sí podremos ver y conocer cómo fueron sus primeros pasos hasta convertirse en leyenda.

El guion de Soule no se complica la vida ni nos mete en enrevesadas tramas secundarias que resten protagonismo a Darth Vader. El lector que se compra esta obra quiere Vader, Vader, Vader y cuando ya tenga suficiente, un poco más de Vader todavía. Soule cumple con esa misión. Incluso cuando el lord oscuro no es el protagonista principal de las viñetas, su presencia se mantiene en el aire. Cuando está, llena las páginas y cuando no, se intuye que está a punto de aparecer.

En mi opinión se agradece que el guion vaya al grano y no se pierda en experimentos. Quizá por momentos se echa de menos más contundencia y desarrollo en historias secundarias, sin embargo, el dinamismo de la historia se muestra estable sin perder nunca interés por lo que estamos viendo. Aquí se viene a "matar jedis" y se matan. Aquí se viene a por un Vader oscuro, asesino, lleno de ira y con un poder casi invencible y se tiene a un Vader oscuro, asesino, lleno de ira y con un poder casi invencible. Cumple lo que promete y no es tarea fácil cuando estás mostrando una de las historias más importantes de este villano archiconocido.

Al igual que ocurre con el guion de Soule, el dibujo liderado por Giuseppe Camuncoli cumple de sobra con las expectactivas y no es fácil, sobre todo por un aspecto: a Vader, como es lógico, no se le ve la cara y para mostrar su ira y sus estados de ánimo tienes que usar otro tipo de elementos que no serían necesarios en personajes con la cara al descubierto. Ahí entra en juego la figura del lord sith o sus famosos gestos con su puño asesino estrangulando cuellos por doquier. Camuncoli, que a veces se ayuda de alguna expresión ‘imposible’ y ‘tramposa’ de los ojos del casco, se centra en dar grandiosidad al porte imponente y oscuro del antiguo caballero jedi. Vader es grande, se hace aún más grande con el dibujo y como no con el color y el entintado que acompañan a la perfección los contextos de la historia.

También me gustaría destacar la espectacularidad de los escenarios, algo que es innegociable cuando de planetas y mundos hablamos en Star Wars. Veremos brillar el dibujo en escenas de lucha y en momentos claves como los que se vivirán, por ejemplo, en Mustafar.

Es cierto que Vader se los come a todos con patatas con su mera presencia en las viñetas, pero a esta obra le faltaría profundidad sin la presencia del Emperador, los Inquisidores (cuerpo de élite destinado a matar jedis) o el Gran Moff Tarkin. Destaco al primero, gran causante del nacimiento, profanación y perversión de Anakin Skywalker, porque sin él Vader perdería capas de profundidad. Palpatine manipulará a su antojo a su aprendiz y le pondrá a prueba sin miramientos como nuevo sith. Incluso usará a los inquisidores y a Tarkin para probar la fortaleza de su ‘perro guardián’ llevándole al extremo en un nuevo intento por terminar de reducir a cenizas al antiguo Anakin. Soule y Camuncoli entienden a la perfección el papel del dictador oscuro y lo saben hilar de manera brillante con la evolución de Vader.

Además, los guiños a Padme, Obi Wan y también a la madre de Anakin nos permitirán recordar constantemente el sufrimiento del exjedi y su agonía continua debido a sus malas elecciones. Incluso le veremos dudar perdiéndose en recuerdos y melancolías pasadas. Todo ello conforman un cómic a la altura de la leyenda de Vader que hará las delicias de los más fans del personaje y también de aquellos que simple y llanamente quieran conocer algo más del lord oscuro de la fuerza.